Cosas que te pueden ayudar a recibir una mejor atención en un restaurante.

Imagina que vas a una entrevista de trabajo y te piden los siguientes requisitos: tienes que saber vender, tratar con todo tipo de personalidades (muchas veces al mismo tiempo), hacer cálculos exactos sin equivocarte, hacer malabares y correr de un lado a otro teniendo equilibrio para cargar objetos, memorizar un sinfín de pedidos y escribir a velocidad ultrasónica mientras múltiples personas te hablan y hay un ruido tremendo de fondo. Pues este trabajo es uno de los más comunes, se llama mesero.

Por freepik.es

Ser mesero es uno de los oficios más difíciles que existen y uno de los más subestimados, lo sabemos de primera mano porque estuvimos haciendo su trabajo por un tiempo para aprender de ellos, créeme que varias cervezas derramadas y pedidos mal anotados te enseñan mucho.

Por esta razón queremos ayudarles un poco, una manera es con Menumy, disminuyendo la carga de sus tareas rutinarias (como tomar los pedidos, separar cuentas, etc.) para que puedan enfocarse en lo realmente importante: cerciorarse de que sus clientes estén satisfechos. Otra forma es difundiendo empatía por este trabajo tan noble.

Por ello te queremos mencionar algunas cosas que puedes hacer de acuerdo a sus opiniones y que podrías cuidar la próxima vez que vayas a comer a un restaurante para que ellos puedan darte un mejor servicio.

1.- Deja de lado las bromas pesadas: Los meseros (al menos la mayoría) están prácticamente indefensos para responder de mal modo a los desplantes de los comensales, hacer una broma sobre su apariencia o alguna otra cosa les ofende, además de que te hará ver mal frente a tus amigos. Si vas a hacer una broma que sea con ellos, no contra ellos, así que por favor nada de "Ráyate el... codo".

2.- Da importancia al nombre: En muchos restaurantes el mesero te dice "hola soy Gaspar y seré su mesero esta noche", pero al hablarles les decimos "oye muchacho" o "hey chavo", ¡hay incluso quienes truenan los dedos o chiflan!, además de ser de mal gusto te restará puntos en la atención que recibas. Intenta hablarles por su nombre, levantar la mano o decir "Señor" o "Joven".

3.- Espera tu turno cuando necesites algo: Cuando veas que tu mesera está atendiendo a alguien más espera tu turno para poder hablar con ella, solo alza tu mano y vendrá en cuanto pueda.

4.- Admite que te equivocaste al pedir algo y asume la responsabilidad: ¿Pensaste en una salsa para tus alitas y al final pediste otra? ¿Pediste una hamburguesa Portobello y no sabías que venía sin carne, pero no preguntaste? muchos comensales no admitimos cuando nos equivocamos, ya sea por orgullo o por pena, pero eso le cuesta al mesero, si no fue nuestra culpa está bien defendernos, pero si lo fue hay que admitirlo y hacernos responsables, después de todo las hamburguesas Portobello también son muy sabrosas ;).

5.- Intenta tener un poco más de empatía: Todos podemos tener un mal día y eso es aceptable, pero debemos evitar transmitirlo a los demás, no solo a los meseros sino a todos, ¿No te vio el mesero cuando el hablaste? no te lo tomes personal, piensa que está atendiendo a 20 personas más. ¿El restaurante está muy lleno? ¿Cobran extra por la ketchup? Todas estas cosas no son culpa de ellos.

6.- Evita cambiar toda la receta de tus pedidos: Esto pasa especialmente en los restaurantes de Sushi, "Me das un rollo X sin alga, el camarón me lo cambias por pollo, el topping en vez de ponerlo encima lo pones por un lado, etc, etc", es entendible que no te guste un ingrediente o seas alérgico a las nueces, pero de eso a cambiar totalmente un platillo hay mucha diferencia, retrasa enormemente el servicio que recibes tanto tu como todos en el restaurante, tanto al mesero como a cocina y puede causar errores al traer tu pedido. Piensa que alguien ya se dio a la tarea de diseñar y crear un platillo delicioso para ti y es algo irrespetuoso cambiarlo, una alternativa es leer detenidamente el menú, por lo general habrá algo que se adecúe mejor a tus necesidades.

7.- Mira el menú al menos por encima: Antes de preguntar qué sabores de agua tienen, mira el menú, por lo general ahí viene esa información y no tienes que detener el servicio para que te repitan cada sabor, incluso pasa que lo tienen que hacer dos o tres veces en la misma mesa. Con Menumy por ejemplo, puedes ver cada platillo con todos sus ingredientes o incluso buscar platillos por nombre o ingrediente, así despejas las dudas que tengas y recibes un servicio mucho más rápido. Además al mirar el menú podrás saber todo lo que ofrecen y quizá te provoque experimentar nuevos sabores.

8.- Menciona tu forma de pago al pedir la cuenta: Normalmente al pedir la cuenta se nos olvida que vamos a hacer el pago con tarjeta, hasta que nos traen el ticket, entonces el mesero tiene que volver a ir por la terminal, podemos ahorrarles esa vuelta fácilmente al decir "La cuenta por favor, pagaré con tarjeta".

Sí, sabemos que el trabajo del mesero es atender al comensal y no al revés, pero no nos cuesta nada aplicar estos consejos y pueden prevenir malos momentos, además de que te hará obtener un mucho mejor servicio, es un ganar-ganar.